El Hombre adoptado por Dios segunda parte

 

Colaboración del Hermano Héctor Medina

En Romanos 8:38, 39 leemos que nadie nos podrá separar del amor de Dios, esto se antoja imposible,

los mismos discípulos de Cristo lo creían así, en Mateo 19:25, el Señor afirma que es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja a que un rico se salve, asombrados los discípulos exclaman, pues quien podrá ser salvo, la verdad es que ni un rico ni pobre, ni nadie podrá salvarse, es imposible para el hombre, pero no para Dios, pero sí tenemos los genes de la imperfección y de la muerte, 

¿Cómo librarnos de ellos?, reescribiendo la historia, en un nuevo comienzo, con un nuevo Adán.

 Adán significa tierra, y de la tierra fue tomado, y ciertamente todos los elementos de nuestro cuerpo están en la tierra, excepto uno que fue agregado por el soplo de Dios,

Génesis 12:7 dice, y soplo Dios en su nariz, y fue el hombre un ser viviente.

Pues qué gran problema, el Diablo cae, y arrastra con él a muchos Ángeles, Adán cae y arrastra consigo a la humanidad, y las puertas se cierran

Génesis 3:24 dice que puso querubines cuidando la puerta para que nadie entrara.

De pronto, en el transcurso de los siglos, aparece un hombre que afirma que Él es la puerta, 

Juan 10:9 Cristo dice yo soy la puerta, el que por mí entraré será salvo, entrara y saldrá y hallará pastos.

Esto parece locura para todas las generaciones, excepto para algunos, y el Plan de Dios empieza a ser entendido por unos pocos.

Muchos piensan que tienen que librarse de la imperfección para entrar por la puerta, conozco muchos que piensan así, pero no, debemos entrar por la puerta primero saldremos y encontraremos pastos, ¿Cuáles son estos pastos? Pues es el alimento, 

Mateo 4:4 dice, no solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.

La única palabra de Dios que conocemos está en la Biblia, en 

Juan 8:32 Cristo recomienda que si permanecemos en esta palabra seremos sus discípulos y conoceremos la verdad

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En Apocalipsis 22:19 dice que si alguien añade o quita palabras Dios quitará su parte del libro de la vida.

CONTINUARA

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