El hombre adoptado por Dios

 

Colaboración del Hermano Héctor Medina

Primera Parte:

 

Sin duda el pasaje más famoso de la biblia es este, porque de tal manera amo Dios al mundo, que ha dado a su hijo unigénito, para que todo aquel que en Él crea no se pierda más, tenga vida eterna,

 Juan 3:16

pero la pregunta sería, ¿Por qué nos ama tanto Dios?, vayamos al principio, Génesis capítulo primero, vemos a Dios muy ocupado, haciendo un mundo hermoso y habitable, se nota que está desarrollando un plan, preconcebido,

Verso 11 dijo Dios produzca la tierra, hierba verde, hierba que de semilla, árbol de fruto que dé fruto según su género, 

Verso 20 produzcan las aguas, seres vivientes, aves que vuelen, etc.

Verso 24 y luego le ordena a la tierra que produzca seres vivientes, bestias serpientes y animales de la tierra, notemos que a vida comienza en el agua y en esto la ciencia no pone objeción, pero también notemos que a la tierra se le ordena producir seres vivientes, acaso el hombre no es un ser viviente, pero la tierra no hizo ningún hombre, 

Verso 26 la creación del hombre está reservado para las manos de Dios, hagamos al hombre ah y lo hizo conforme a su semejanza, quería que nos pareciéramos a Él, con razón Dios se resiste a que el hombre se pierda, con razón nos ama tanto, pero al diablo lo hizo perfecto y se perdió, al hombre lo hizo perfecto y cayó, el hombre dejo de ser perfecto y trasmitió los genes de la imperfección a todos sus descendientes y, sin embargo, el amor de Dios preexistió y lo siguió cuidando hasta la fecha.

Pero el deseo de Dios es que la obra de sus manos conviva con Él. 

Juan 17:24, aquellos que me has dado quiero que donde yo estoy, también estén conmigo.

Pero el hombre debe de ser elevado a otro nivel, para que pueda convivir con Dios, donde ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo porvenir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos pueda separar del amor de Dios.

Los ángeles caídos no tuvieron esta oportunidad, pero el hombre sí.

 

 

 

CONTINUARA